La creciente participación de mujeres en deportes de fuerza ha impulsado el interés por mantener este tipo de entrenamiento durante el embarazo. Sin embargo, las directrices actuales recomiendan ejercicios de intensidad moderada debido a la falta de evidencia sobre la seguridad de esfuerzos de alta intensidad durante la gestación. Este estudio abordó esta brecha investigando las respuestas maternas y fetales a ejercicios de fuerza de alta intensidad, incluyendo movimientos compuestos como sentadillas, press de banca y peso muerto, realizados al 90% de la capacidad máxima de 10 repeticiones (10 RM). Se incluyó también la maniobra de Valsalva, una técnica de respiración comúnmente utilizada en levantamientos de peso.
El objetivo fue cuantificar y comparar las respuestas cardiovasculares materno-fetales en mujeres embarazadas y no embarazadas. Este enfoque proporcionó datos directos sobre el bienestar materno y fetal frente a estos ejercicios.
Los resultados del estudio mostraron que tanto las participantes embarazadas como no embarazadas toleraron bien los ejercicios de fuerza de alta intensidad. No se observaron signos de bradicardia fetal ni alteraciones significativas en el flujo sanguíneo umbilical, incluso al utilizar la maniobra de Valsalva o realizar ejercicios en posición supina. Los parámetros clave, como el índice de resistencia (RI) y el índice de pulsatilidad (PI), se mantuvieron dentro de los rangos normales, indicando que el flujo sanguíneo al feto no se vio comprometido.
Las participantes embarazadas pudieron levantar pesos similares a las no embarazadas, con una media del 90% de 10 RM para sentadillas (51,5 kg frente a 57,6 kg), press de banca (34,2 kg frente a 32,2 kg) y peso muerto (59,0 kg frente a 61,2 kg). Las tasas de esfuerzo percibido (RPE) y la frecuencia cardíaca materna aumentaron de forma proporcional al incremento de la carga. La frecuencia cardíaca alcanzó picos de 137 bpm en sentadillas, 111 bpm en press de banca y 131 bpm en peso muerto. Los cambios en la presión arterial y lactato fueron mínimos y dentro de rangos normales, lo que sugiere que las respuestas cardiovasculares al ejercicio intenso son manejables para mujeres saludables en la segunda mitad del embarazo.
El estudio es pionero en evaluar directamente las respuestas fetales a ejercicios de alta intensidad. No se observaron alteraciones en la frecuencia cardíaca fetal ni en los índices de flujo sanguíneo umbilical antes o después del ejercicio, lo que indica una tolerancia adecuada por parte del feto. Además, los resultados de los embarazos fueron positivos: los bebés nacieron a término (media de 39,5 semanas), con pesos adecuados y sin complicaciones neonatales significativas.
Estos hallazgos desafían la creencia tradicional de que el entrenamiento de fuerza de alta intensidad es inseguro durante el embarazo. Proveen una base empírica para desarrollar recomendaciones específicas para mujeres que deseen mantener ejercicios de alta intensidad durante la gestación. Aunque las guías actuales promueven ejercicios de fuerza moderada, este estudio destaca que el entrenamiento de alta intensidad, cuando se realiza de manera controlada, es una opción viable para mujeres embarazadas con experiencia previa en entrenamiento de fuerza.
El estudio aporta datos novedosos sobre el impacto de ejercicios compuestos y técnicas de respiración en mujeres embarazadas entrenadas. Sin embargo, el tamaño reducido de la muestra (10 mujeres embarazadas) limita la generalización de los resultados. Además, las participantes tenían experiencia previa en entrenamiento de fuerza, lo que podría influir en los resultados. Futuros estudios deberían explorar los efectos del entrenamiento de alta intensidad en mujeres sin experiencia previa y durante todas las etapas del embarazo.
Conclusión
El ejercicio de fuerza de alta intensidad, incluyendo el uso de la maniobra de Valsalva y posiciones supinas, es bien tolerado por madres y fetos en embarazos saludables avanzados. Estos datos respaldan la seguridad del entrenamiento de fuerza para mujeres embarazadas y establecen un punto de partida para futuras investigaciones que amplíen la comprensión sobre el impacto de este tipo de actividad física durante la gestación.
Acceso libre al artículo original en: http://www.fisiologiadelejercicio.com/wp-content/uploads/2025/01/Maternal-and-fetal-responses-to-acute-high-intensity.pdf
Referencia completa:
Moolyk AN, Wilson MK, Matenchuk BA, Bains G, Gervais MJ, Wowdzia JB, Davenport MH. Maternal and fetal responses to acute high-intensity resistance exercise during pregnancy. Br J Sports Med. 2024 Dec 18:bjsports-2024-108804. doi: 10.1136/bjsports-2024-108804.