Ganancia de fuerza máxima con entrenamiento de fuerza frente a entrenamiento concurrente

(post destacado 2018) Combinar entrenamiento de fuerza y aeróbico (entrenamiento concurrente) es habitual en la mayoría de los deportistas y personas que realizan ejercicio físico. Esa combinación se realiza en la misma sesión ó en sesiones separadas por horas o días, y sus posibles efectos interferenciales en las adaptaciones propias de cada modalidad de entrenamiento han sido estudiadas en profundidad en los últimos años. Recientemente se han publicado los resultados de un estudio (Panissa y col, 2018; J Sports Sci Med 17:623-632) cuyo objetivo fue comparar la ganancia de fuerza máxima durante un entrenamiento de fuerza (ST) o entrenamiento concurrente (CT) que consistió en entrenamiento intermitente de alta intensidad más entrenamiento de fuerza, en un periodo de 12 semanas de intervención. Un segundo objetivo fue examinar la relación entre el volumen de entrenamiento de fuerza y la ganancia de fuerza en ambos grupos. Participaron 10 hombres físicamente activos que fueron asignados aleatoriamente a los grupos CT y ST. El grupo CT realizó esfuerzos de 1 min al 100% VAM, con 1 min de recuperación pasiva hasta acumular una distancia de 5 km; a continuación, realizaron el entrenamiento de fuerza que consistió en 3 series de 7 ejercicios al 8-12 RM. El entrenamiento se llevó a cabo dos veces por semana durante 12 semanas. El grupo ST solo realizó entrenamiento de fuerza en el mismo periodo. El número de repeticiones (volumen de carga) no fue diferente entre grupos. Los resultados mostraron que el 1RM absoluto aumentó en ambos grupos a las 8 y 12 semanas, mientras que el 1RM relativo al peso corporal aumentó en ambos grupos en la semana 8, pero solo en el grupo ST entre la semana 8 y la 12. Se observó una elevada correlación entre el volumen de carga para miembros inferiores y el cambio en la fuerza máxima entre el inicio y la semana 8 en el grupo CT, pero no se observó esa correlación en el grupo ST. Los autores sugieren que realizar entrenamiento interválico de alta intensidad dos veces a la semana antes del entrenamiento de fuerza no afecta a la ganancia de fuerza después de 8 semanas de entrenamiento, pero solo el entrenamiento de fuerza aislado mostró un aumento de la fuerza relativa después de 12 semanas.

Es complicado obtener conclusiones genéricas en relación al entrenamiento concurrente debido tanto a las múltiples formas posibles de combinación de ambas modalidades de entrenamiento, como los distintos perfiles de los sujetos en los que se aplica. Como norma general, cuando el entrenamiento concurrente se realiza en la misma sesión, el principal objetivo del entrenamiento (fuerza o aeróbico) debería ejecutarse primero. Si es posible es preferible separar ambas modalidades de entrenamiento al menos 6 h, y siempre situando la primera la del objetivo principal.

Suscríbete ahora al Club EP&T, y llévate todas las formaciones por sólo 8€/mes, además de poder acceder a artículos especiales del blog