Comparación entre la crioterapia y la fotobiomodulación en recuperación muscular

La fotobiomodulación es un término recientemente acuñado que hace referencia a las terapias de luz que actúan dentro de las de longitudes de onda gamma entre 600-1000 nm, que anteriormente se conocían bajo los nombres de láser de bajo nivel, terapia con láser de baja intensidad, terapia con láser de baja potencia, láser frio, láser suave, fotobioestimulación y fotobiomodulación; todos muy utilizados en un número de especialidades médicas que incluyen lesiones del aparato locomotor, enfermedades de la piel, enfermedades degenerativas, síndromes de dolor neuropático y lesiones cerebrales traumáticas. Los mecanismos celulares incluyen la activación del citocromo C oxidasa, en las mitocondrias que se cree son un sitio probable para los primeros efectos de la luz, lo que lleva a un aumento de la producción de ATP, la modulación de especies reactivas del oxígeno y la inducción de factores de transcripción. Estos efectos a su vez, conducen a un aumento de la proliferación celular y la migración (en particular por los fibroblastos) (tomado de https://piel-l.org/blog/43703).

Los beneficios de la aplicación de fotobiomodulación se deben a sus efectos fisiológicos, como la mejora de la microcirculación, aumento de la síntesis de ATP, disminución del estrés oxidativo en los músculos ejercitados, y una mejor recuperación muscular en el corto plazo.

Recientemente se han publicado los resultados de un metaanálisis (Ferlito y col, 2021; Lasers Med Sci 20-oct; doi: 10.1007/s10103-021-03442-7) cuyo objetivo fue comparar el efecto de la terapia de fotobiomodulación (PBMT) y la crioterapia (CRT) en los resultados de la recuperación muscular.

Se incluyeron ensayos clínicos aleatorios con voluntarios humanos sanos (> 18 años) sometidos a una intervención de PBMT y CRT, cuando se utiliza en forma aislada después del ejercicio. Se incluyeron cuatro artículos (66 participantes).

Los resultados mostraron que la PBMT mejoraba la fuerza muscular (DME = 1,73, IC 95% 1,33 a 2,13, I2 = 27%, p <0,00001), reducía el dolor muscular de aparición tardía (DM: – 25,69%, IC 95% – 34,42 a – 16,97 , I2 = 89%, p <0,00001), y disminuía la concentración de biomarcadores de daño muscular (DME = – 1,48, IC 95% – 1,93 a – 1,03, I2 = 76%, p <0,00,001) en comparación con CRT. No hubo diferencia en el estrés oxidativo y los niveles inflamatorios.

Los resultados sugieren que el uso de PBMT en la recuperación muscular después del ejercicio de alta intensidad parece ser beneficioso, proporciona un efecto clínicamente importante y parece ser la mejor opción en comparación con crioterapia.

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