Comentario de Jeukendrup AE. https://www.mysportscience.com/post/are-continuous-glucose-monitors-cgms-accurate
En su mayor parte, los monitores continuos de glucosa (CGMs) más recientes son bastante precisos, aunque parecen dar lecturas un poco más altas, en promedio, cuando los niveles de glucosa son bajos (es decir, <4 mmol/L o <72 mg/dL), y la precisión puede ser menor cuando los niveles de glucosa cambian rápidamente.
Los CGM miden la glucosa en el líquido intersticial y no en la sangre. La glucosa fluye primero al torrente sanguíneo y luego al espacio intersticial, con un retraso de aproximadamente 10-20 minutos. Por lo tanto, cuando los niveles de glucosa cambian rápidamente, como después de una comida o durante un ejercicio intenso, los CGMs parecen ser menos precisos. Sin embargo, esto es simplemente un problema de retraso y NO un problema de precisión. Los CGM reflejan con precisión lo que está ocurriendo en el torrente sanguíneo, pero con un retraso.
Además, la diferencia en el tiempo de retraso entre la sangre y el líquido intersticial puede ser de hasta 20 minutos durante el ejercicio, pero el CGM finalmente se pone al día cuando se alcanza un estado estable. Por lo tanto, si tienes un medidor de glucosa, es importante tener en cuenta este retraso antes de acusar al CGM de ser inexacto. Si deseas comparar el valor de un medidor de glucosa en sangre con el valor de un CGM, lo mejor es hacerlo cuando la glucosa parece estar plana y estable.
Los estudios de precisión de la mayoría de los dispositivos CGM muestran que las lecturas de glucosa suelen estar dentro del ~10% del valor real. Por ejemplo, si tu glucosa en sangre es realmente de 100 mg/dL, un CGM podría mostrar un valor alrededor de 90 mg/dL o 120 mg/dL para tu glucosa intersticial.
Sin embargo, estos mismos estudios muestran que de vez en cuando, los valores del CGM pueden estar bastante desviados en comparación con los valores de glucosa en el torrente sanguíneo (glucosa en sangre). Esto probablemente se debe al problema de retraso mencionado anteriormente.
Los músculos y sistema nervioso central “ven” la glucosa intersticial, no la glucosa en sangre, por lo que creemos que la detección de la glucosa intersticial puede ser más importante que la glucosa en sangre para el rendimiento en el ejercicio.
Los CGMs pueden mostrar lecturas más bajas durante la noche, especialmente si estás acostado sobre el sensor. Esto se llama una “baja por compresión”. Además, los CGMs también están influenciados por el estado de hidratación, y algunos dispositivos incluso pueden proporcionar lecturas falsas con ciertos medicamentos como el acetaminofén, el ácido salicílico y altas dosis de vitaminas como la vitamina C. Algunos sistemas tienen una precisión inferior al comienzo del período de uso, mientras que otros pueden experimentar una disminución en la precisión en el último día de uso del sensor. Por lo tanto, quizás es importante tener precaución al usar el dispositivo en el primer y último día.
En resumen, los sistemas de CGM son precisos en general. La desviación de valores suele deberse a un retraso en el equilibrio de la glucosa entre el torrente sanguíneo y el espacio intersticial donde el sensor de glucosa realiza sus mediciones. Por lo tanto, sugerimos centrarse en las tendencias de la glucosa a lo largo del tiempo.