Estar sentado durante mucho tiempo puede tener efectos perjudiciales sobre varios marcadores de salud cardiovasculares y cardiometabólicos. Sin embargo, hasta la fecha, no ha habido una síntesis de los datos de la presión arterial, un marcador importante de la salud cardiovascular. De manera similar, ningún estudio previo ha consolidado los efectos de las interrupciones al sentarse sobre la presión arterial.
Recientemente se han publicado los resultados de un metaanálisis (Paterson y col, 2021; Sports Med 21-dic; doi: 10.1007/s40279-021-01614-7) cuyos objetivos fueron: (1) evaluar el efecto de la exposición a estar sentado de forma prolongada sobre la presión arterial y (2) determinar la eficacia de las estrategias de interrupción del asiento como un medio para contrarrestar cualquier efecto negativo.
Métodos de valoración y síntesis: En total, se identificaron 9763 artículos, de los cuales 33 cumplieron criterios de inclusión para el objetivo (1). De esos artículos, 22 cumplieron los criterios de inclusión para el objetivo (2).
Resultados: (1) Estar sentado de forma prolongada e ininterrumpida dio lugar a aumentos insignificantes y pequeños en la presión arterial sistólica y presión arterial media, respectivamente, y un aumento trivial no significativo de la presión arterial diastólica. Los análisis de subgrupos indicaron que los aumentos de la presión arterial sistólica y la presión arterial media fueron más pronunciados en los grupos de edad más jóvenes. (2) La interrupción de episodios prolongados de estar sentado resultó en una presión arterial sistólica significativamente más baja y presión arterial diastólica, en comparación con las condiciones de control, particularmente cuando se utilizan estrategias de interrupción aeróbica.
Los autores concluyeron que la exposición a estar sentado de manera ininterrumpida da como resultado un aumento significativo de la presión arterial sistólica y la presión arterial media, especialmente en los grupos de edad más jóvenes. La interrupción regular de episodios prolongados de estar sentado, particularmente con estrategias de interrupción aeróbica, puede reducir los efectos negativos.
Son muchos los estudios que han mostrado fuerte evidencia de los efectos negativos para nuestra salud por permanecer durante largo tiempo sentados. Ya que en la mayoría de las ocupaciones laborales permanecer sentados es lo habitual, las empresas y los trabajadores han de tratar de minimizar al máximo el efecto deletéreo para nuestra salud de permanecer sentados durante mucho tiempo. No es sencillo interrumpir el trabajo cada 15 min, para realizar una actividad muscular de miembros inferiores durante 15 min, ni tampoco establecer como rutina reuniones de pie, ni habilitar a los despachos de mesas altas para tener que trabajar en bipedestación. Todas esas medidas son eficaces, y hay que intentar llevarlas a la práctica, pero sinceramente, no soy muy optimista al respecto
