Recientemente se han publicado los resultados de un metaanálisis (Momma y col, 2022; Br J Sports Med 28feb: doi: 10.1136/bjsports-2021-105061) cuyo objetivo fue cuantificar las asociaciones entre las actividades de fortalecimiento muscular y el riesgo de enfermedades no transmisibles y mortalidad en adultos independientemente de las actividades aeróbicas. Dieciséis estudios cumplieron los criterios de elegibilidad.
Los resultados mostraron que las actividades de fortalecimiento muscular se asociaron con un riesgo 10-17% menor de mortalidad por cualquier causa, enfermedad cardiovascular (ECV), cáncer en conjunto, diabetes y cáncer de pulmón. No se encontró asociación entre las actividades de fortalecimiento muscular y el riesgo de algunos cánceres específicos (cánceres de colon, riñón, vejiga y páncreas). Se encontraron asociaciones en forma de J con la máxima reducción del riesgo (aproximadamente 10-20 %) a aproximadamente 30-60 min/semana de actividades de fortalecimiento muscular para todas las causas de mortalidad, ECV y cáncer total, mientras que una asociación en forma de L que muestra una gran reducción del riesgo de hasta 60 min/semana de actividades de fortalecimiento muscular para la diabetes. Las actividades combinadas de fortalecimiento muscular y aeróbicas (frente a ninguna) se asociaron con un menor riesgo de todas las causas, enfermedades cardiovasculares y mortalidad total por cáncer.
Los autores concluyeron que las actividades de fortalecimiento muscular se asociaron inversamente con el riesgo de mortalidad por todas las causas y las principales enfermedades no transmisibles, incluidas las ECV, el cáncer total, la diabetes y el cáncer de pulmón; sin embargo, la influencia de un mayor volumen de actividades de fortalecimiento muscular sobre la mortalidad por todas las causas, las enfermedades cardiovasculares y el cáncer total no está clara cuando se consideran las asociaciones en forma de J observadas.
El tejido muscular esquelético es el eje de nuestra salud. Mantener un tejido muscular activo, conservando el tamaño global y la fuerza, debe ser sin duda el primer objetivo en la asociación ejercicio-salud. De esta manera el entrenamiento de fuerza en sus más diversas manifestaciones es la modalidad de ejercicio más recomendada cuando hablamos de salud, especialmente cuando la edad avanza
