La actividad física mejora de forma significativa la salud mental y física, ayudando a reducir el estrés y mejorar el funcionamiento cardiovascular. Sin embargo, tanto la falta de cultura deportiva entre amateurs como los excesos en los entrenamientos de atletas profesionales pueden provocar sobreentrenamiento, con consecuencias como fatiga crónica o lesiones. Para evitarlo, se han desarrollado herramientas de control del entrenamiento como monitores de frecuencia cardíaca, análisis biomecánicos y evaluaciones metabolómicas.
En este contexto, la metabolómica ha emergido como un campo útil para estudiar los cambios bioquímicos inducidos por el ejercicio, dando lugar al subcampo del sportomics. Este se centra en detectar firmas metabólicas en fluidos biológicos como sangre, suero, orina, sudor o saliva, con el fin de monitorizar el estado fisiológico del deportista.
De todos estos fluidos, la saliva se considera un medio óptimo por su facilidad y seguridad de obtención, siendo menos invasiva que la extracción sanguínea. La saliva ha demostrado utilidad diagnóstica en múltiples condiciones médicas (Alzheimer, cáncer, enfermedades periodontales) y recientemente ha ganado relevancia para el análisis del impacto metabólico del ejercicio. Algunos biomarcadores salivales como el lactato ya se han relacionado con la fatiga inducida por el ejercicio.
La saliva contiene un 99% de agua y un 1% de compuestos orgánicos e inorgánicos, entre los que se encuentra el tiocianato (SCN⁻). Este anión está presente en concentraciones entre 0.5 y 3 mM en no fumadores, siendo más elevado en fumadores, y juega un papel fundamental en la defensa antimicrobiana a través del sistema lactoperoxidasa, que transforma SCN⁻ en compuestos con acción antibacteriana usando peróxido de hidrógeno.
Aunque el tiocianato se ha estudiado como biomarcador del tabaquismo, su comportamiento frente al ejercicio físico es prácticamente desconocido. Solo algunos estudios previos han sugerido que sus niveles pueden disminuir con la actividad física. Dada su alta concentración en saliva y su rol inmunológico, el SCN⁻ se propone en este estudio como un posible biomarcador no invasivo del esfuerzo físico.
Este trabajo tuvo como objetivo principal explorar la viabilidad del SCN⁻ salival como biomarcador del esfuerzo físico. Para ello, se desarrolló y validó un método fotométrico sencillo para cuantificar SCN⁻, aplicándose en dos contextos:
- Un protocolo controlado en cinta rodante con 21 atletas que corrieron al 20%, 60% y 90% de su VO₂max.
- Muestreo en condiciones reales con 141 deportistas de diversas disciplinas, antes y después de su entrenamiento habitual.
Además, se consideraron variables individuales como el sexo y el tabaquismo.
- Resultados del estudio controlado
Los atletas sometidos al protocolo en cinta rodante mostraron una reducción significativa de los niveles de SCN⁻ en saliva a medida que aumentaba la intensidad del ejercicio. Esta disminución fue progresiva y consistente tanto en hombres como en mujeres. El análisis estadístico (ANOVA de medidas repetidas y post hoc Bonferroni) confirmó que la intensidad del ejercicio afecta significativamente la concentración de SCN⁻ en ambos sexos.
Estos resultados coinciden con estudios previos realizados con espectroscopía ATR-FTIR, que mostraron reducción de señales infrarrojas del SCN⁻ con el aumento del ejercicio. También se relacionan con hallazgos obtenidos por electroforesis capilar, lo cual respalda el uso del SCN⁻ como biomarcador sensible al ejercicio.
No obstante, la principal limitación de esta parte del estudio es el tamaño reducido de la muestra (n = 21), por lo que se recomienda replicar el experimento en cohortes mayores para robustecer las conclusiones.
- Resultados en condiciones reales
Se midieron los niveles de SCN⁻ en 141 deportistas antes y después de sus entrenamientos habituales. Se dividieron en cuatro grupos según sexo y condición de fumador:
- Hombres fumadores (n = 18)
- Hombres no fumadores (n = 59)
- Mujeres fumadoras (n = 12)
- Mujeres no fumadoras (n = 52)
En todos los grupos, excepto el de mujeres fumadoras, se observó una disminución significativa en los niveles de SCN⁻ tras el ejercicio. El descenso fue más pronunciado en hombres que en mujeres, lo que sugiere posibles diferencias fisiológicas entre sexos (p. ej., tamaño de glándulas salivales o ajustes respiratorios).
En las mujeres fumadoras no se observó una diferencia significativa, probablemente debido a su pequeño tamaño muestral y a sus altos niveles basales de SCN⁻. El tabaquismo, como era de esperar, aumentó los niveles iniciales de SCN⁻ en saliva, lo que puede enmascarar los efectos del ejercicio.
- Mecanismos bioquímicos subyacentes
El descenso del SCN⁻ no parece ser un fenómeno pasivo, sino el resultado de un proceso bioquímico activo. Durante el ejercicio, se incrementa la actividad de la lactoperoxidasa salival, que utiliza H₂O₂ para oxidar SCN⁻ y generar compuestos antimicrobianos como OSCN⁻. Al mismo tiempo, el aumento del lactato durante el ejercicio anaeróbico favorece la producción de H₂O₂, acelerando aún más la conversión del SCN⁻.
Por tanto, la reducción observada de SCN⁻ está vinculada al incremento del metabolismo anaeróbico, la producción de lactato y la activación del sistema inmune innato. Esta respuesta podría reflejar una adaptación fisiológica al estrés inducido por el ejercicio, con posibles implicaciones para la monitorización del entrenamiento.
Aunque este mecanismo es coherente con la literatura, el estudio no midió directamente ni lactato ni peróxidos ni la actividad enzimática, lo cual se plantea como una línea futura de investigación.
Conclusiones
Este estudio es el primero en investigar de forma cuantitativa y sistemática el tiocianato salival como biomarcador del ejercicio físico. Los resultados, obtenidos tanto en entornos controlados como reales, sugieren que los niveles de SCN⁻ en saliva disminuyen significativamente con el esfuerzo físico, de forma proporcional a la intensidad del mismo.
Además, se evidencian diferencias por sexo y hábito tabáquico, lo que refuerza la importancia de considerar factores individuales. Gracias a su naturaleza no invasiva, bajo coste y facilidad de recolección, el SCN⁻ salival podría convertirse en una herramienta útil para monitorizar el estado fisiológico, el estrés metabólico o incluso el sobreentrenamiento en atletas.
Se abren así nuevas vías de investigación para integrar este biomarcador en programas de entrenamiento personalizado o estrategias de prevención del sobreesfuerzo, y se recomienda explorar con más detalle su relación con otros marcadores metabólicos como el lactato, el peróxido de hidrógeno y la actividad de la lactoperoxidasa.
Acceso libre al artículo original en: https://www.fisiologiadelejercicio.com/wp-content/uploads/2025/07/Exploring-Salivary-Thiocyanate.pdf
Referencia completa:
Chrimatopoulos C, Papadopoulou K, Tsilouli T, Sakkas V. Exploring Salivary Thiocyanate as a Novel Biomarker of Physical Activity Response. Molecules. 2025 Jun 5;30(11):2476. doi: 10.3390/molecules30112476.



