Recientemente se han publicado los resultados de un estudio (Morgans y col, 2022; Int J Environ Res Public Health 19:11784; doi: 10.3390/ijerph191811784) cuyo objetivo fue examinar las respuestas de inmunoglobulina A salival (s-IgA) y cortisol salival (s-Cort) en partidos de competición en jugadores de fútbol masculino de élite.
Se recogieron datos de 19 jugadores (media ± SD, edad: 26 ± 4 años; peso: 80,5 ± 8,1 kg; altura: 1,83 ± 0,07 m; grasa corporal 10,8 ± 0,7%) de un equipo de la Premier League rusa a lo largo de 6 semanas durante la temporada 2021-2022. Las cargas físicas de los partidos se midieron a través de un sistema de seguimiento óptico. s-IgA y s-Cort se evaluaron un día antes de cada partido (DM – 1), 60 min antes del saque inicial, 30 min después del partido y 48 h después del partido (DM + 2).
A los 60 minutos antes del inicio, los valores de s-IgA fueron más bajos que en MD – 1. Además, en comparación con 60 minutos antes del inicio del partido, la s-IgA fue mayor a los 30 minutos posteriores al partido y en MD + 2. A los 30 minutos posteriores al partido, la s-Cort fue más alta que a los 60 minutos antes del inicio del partido, mientras que en MD + 2 la s-Cort fue más alta que a los 60 minutos antes del inicio. Las regresiones de modelos mixtos revelaron que un mayor tiempo de juego y la distancia total recorrida, y un mayor número de aceleraciones de alta intensidad, implicaron diferencias de s-IgA más pequeñas entre los 30 minutos posteriores al partido y los 60 minutos antes del inicio del partido, y entre los 60 minutos antes del partido. Además, mayores distancias de alta intensidad y sprint, y un mayor número de aceleraciones máximas y de alta intensidad, implicaron menores diferencias de s-Cort entre 60 min antes del kick-off y MD + 2.
En conclusión, los presentes resultados demuestran que el uso de la monitorización salival combinada con la carga del partido puede ser una herramienta útil para monitorear la inmunidad de la mucosa individual y las respuestas hormonales al juego y los períodos de recuperación posteriores en jugadores de fútbol de élite.
