Papel del ejercicio en la era de la prehabilitación del cáncer

En el ámbito de la salud, la prehabilitación del cáncer ha emergido como una estrategia crucial para mejorar los resultados postoperatorios y la calidad de vida de los pacientes con cáncer. Este enfoque se centra en optimizar la condición física y mental de los pacientes antes de someterse a cirugía. En este contexto, el ejercicio físico juega un papel fundamental.

El cáncer sigue siendo una de las principales causas de morbilidad y mortalidad a nivel mundial. Con el aumento de las tasas de diagnóstico temprano, más pacientes son elegibles para cirugías curativas. Sin embargo, las complicaciones postoperatorias son comunes y pueden afectar significativamente la recuperación y la supervivencia a largo plazo. La prehabilitación, que incluye intervenciones como el ejercicio físico, ha demostrado ser eficaz para mejorar la capacidad funcional y reducir las complicaciones postoperatorias.

Esta revisión sistemática incluyó estudios de intervención que evaluaron el impacto del ejercicio físico como parte de la prehabilitación en pacientes con cáncer. Los estudios seleccionados abarcaron diferentes tipos de cáncer, como el cáncer ginecológico, de mama, urológico, gastrointestinal y pulmonar.

Cáncer Ginecológico

Los estudios en cáncer ginecológico mostraron que programas de ejercicio supervisados de corta duración (2 semanas) son factibles y seguros. Estos programas mejoraron la capacidad cardiorrespiratoria, la fuerza muscular y algunos aspectos de la calidad de vida sin cambios significativos en la composición corporal.

Cáncer de Mama

En el cáncer de mama, aunque la mayoría de las investigaciones se han centrado en el ejercicio durante y después del tratamiento adyuvante, algunos estudios han explorado la prehabilitación. Un estudio de factibilidad reportó una buena adherencia a un programa de ejercicios en el hogar, mejorando la capacidad cardiorrespiratoria antes de la cirugía y manteniéndola hasta 12 semanas después de la intervención quirúrgica.

Cáncer Urológico

En los cánceres urológicos, estudios en pacientes con cáncer de próstata, vejiga y riñón demostraron que el entrenamiento interválico de alta intensidad (HIIT) mejoró la aptitud cardiorrespiratoria y la presión arterial, aunque no se observaron cambios significativos en la composición corporal. La prehabilitación también mejoró la función sexual y la ansiedad en pacientes con cáncer de próstata.

Cáncer Gastrointestinal

La mayoría de los estudios en cánceres gastrointestinales indicaron que el ejercicio preoperatorio mejora la aptitud cardiorrespiratoria y la fuerza muscular. Un estudio en pacientes con cáncer esofágico reportó una reducción significativa en las complicaciones pulmonares postoperatorias y la duración de la estancia hospitalaria.

Conclusiones

El ejercicio físico como parte de la prehabilitación del cáncer es una intervención prometedora que puede mejorar la condición física de los pacientes, reducir las complicaciones postoperatorias y acelerar la recuperación.

Acceso libre al artículo original en: https://www.fisiologiadelejercicio.com/wp-content/uploads/2024/07/cancer-prehabilitation.pdf

Referencia completa:

Del Bianco N, Borsati A, Toniolo L, Ciurnielli C, Belluomini L, Insolda J, Sposito M, Milella M, Schena F, Pilotto S, Avancini A. What is the role of physical exercise in the era of cancer prehabilitation? A systematic review. Crit Rev Oncol Hematol. 2024 Jun;198:104350. doi: 10.1016/j.critrevonc.2024.104350.

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