El estudio analizó los efectos agudos del ejercicio de intervalos de alta intensidad (HIIT) sobre la presión arterial (PA) en mujeres mayores no entrenadas con diabetes tipo 2 (T2D) e hipertensión (HTN). Se evaluaron dos protocolos de HIIT: uno de mayor volumen (HIIT10, 10 repeticiones de 1 minuto al 90% de la frecuencia cardíaca máxima) y otro de menor volumen (HIIT4, 4 repeticiones de 4 minutos al 90% de la frecuencia cardíaca máxima). Ambos protocolos se compararon con una condición de reposo (REST) en un diseño cruzado. El objetivo principal fue determinar si estos protocolos impactaban la PA inmediatamente después del ejercicio y durante las 24 horas siguientes en condiciones libres.
Metodología y resultados clave
Quince participantes (edad promedio: 69 años) completaron los tres protocolos en días separados. Después de cada sesión, la PA se midió durante un periodo controlado de 4 horas y luego durante 20 horas en condiciones libres mediante monitoreo ambulatorio. No se encontraron diferencias significativas en los parámetros de PA entre las condiciones durante los periodos controlados y libres, tanto diurnos como nocturnos. Sin embargo, ambos protocolos de HIIT redujeron la presión de pulso nocturna (una medida de la rigidez arterial) en comparación con el reposo: 46 mmHg para HIIT4, 45 mmHg para HIIT10, frente a 50 mmHg en REST. Este efecto no mostró diferencias significativas entre HIIT10 y HIIT4. Además, la reducción de la presión arterial sistólica nocturna mostró una tendencia hacia la significancia, pero no se alcanzaron valores estadísticamente significativos.
Discusión:
Los resultados sugieren que los protocolos de HIIT, ya sean de alto o bajo volumen, tienen un impacto limitado o nulo en la PA post-ejercicio y en el monitoreo ambulatorio en mujeres mayores con T2D e HTN. La mayoría de las participantes presentaban PA bien controlada y bajo nivel de condición cardiorrespiratoria, lo que podría haber influido en la falta de efectos significativos. Estos hallazgos destacan la importancia de personalizar las intervenciones de ejercicio y sugieren que HIIT podría ser beneficioso para mejorar ciertos parámetros específicos, como la rigidez arterial, más que para reducir la PA general en esta población.
En conclusión, aunque el HIIT muestra potencial en la reducción de la presión de pulso nocturna, su efecto global sobre la PA en mujeres mayores con T2D e HTN parece ser limitado. Se requieren más estudios para explorar cómo diferentes variables, como la intensidad y el nivel de condición física, podrían modificar estos resultados.
Referencia completa:
Tremblay R, Marcotte-Chénard A, Deslauriers L, Boulay P, Boisvert FM, Geraldes P, Gayda M, Christou DD, Little JP, Mampuya W, Riesco E. Acute Effect of High-Intensity Interval Exercise on Blood Pressure in Females Living with Type 2 Diabetes and Hypertension. Med Sci Sports Exerc. 2025 Jan 14. doi: 10.1249/MSS.0000000000003639.