El tabaquismo es un factor etiológico de varias enfermedades que, en última instancia, provocan una reducción de la capacidad de ejercicio. En particular, los fumadores tienen un mayor riesgo de desarrollar enfermedades obstructivas crónicas (EPOC). Los fumadores sin obstrucción del flujo aéreo tienen reducida la capacidad de ejercicio, pero los mecanismos que lo justifican no se conocen en profundidad.
Recientemente se han publicado los resultados de un estudio (Salama Sadaka y col, 2021; J Appl Physiol (1985) 14-ene; doi: 10.1152/japplphysiol.00762.2020) cuyo objetivo fue comparar la función del cuádriceps utilizando mecanismos de valoración no voluntarios, y los requerimientos ventilatorios durante el ejercicio, entre fumadores sin obstrucción de flujo aéreo y controles que nunca fumaron.
Participaron 20 fumadores y 16 controles de entre 25 y 50 años, con espirometría normal. Realizaron un test ergoespirométrico hasta el agotamiento en cicloergómetro, valorando sintomatología y dinámica de volúmenes pulmonares. También se valoró la fuerza y resistencia aeróbica del cuádriceps mediante estimulación magnética. Se valoró el área transversal del cuádriceps, así como la actividad física realizada.
Los resultados mostraron que los fumadores alcanzaron una potencia pico, VO2pico y umbral anaeróbico significativamente menores que los controles (170+46 vs. 256+57 W; 2.20 ±0.56 vs. 3.18 ±0.72 L/min; 1.38±0.33 vs. 2.09±0.7 L/min, respectivamente; p<0.01 para todos). La resistencia del cuádriceps fue menor en fumadores, aunque la actividad física realizada, la fuerza y el tamaño muscular fueron similares a los controles. Los fumadores mostraron ventilaciones más altas a intensidades submáximas (120W: 52.6±11.8 vs. 40.7±6.0 L/min; p<0.001), un descenso de la eficiencia ventilatoria, así como mayor disnea con más fatiga a cargas iguales, en comparación con las personas que nunca fumaron. Los fumadores no mostraron limitaciones mecánicas sobre el volumen corriente durante el ejercicio.
Los autores concluyeron que las personas fumadoras sin obstrucción de vías aéreas tienen reducida su capacidad aeróbica muscular y la eficiencia ventilatoria en comparación a personas que nunca fumaron, a pesar de realizar la misma actividad física diaria, con un descenso por tanto de su capacidad funcional.
