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Hola Sergio,
Gracias por tus preguntas.
Utilizo los mismos puntos para responderte.1. Es un método relativamente sencillo: se requiere de un analizador de gases para medir consumo de oxígeno (VO2) y producción de dióxido de carbono (VCO2). A través de estos datos se puede saber la cantidad/ritmo de oxidación tanto de carbohidratos como de grasas. Esto es porque las moléculas de grasa tienen menos O2 que las de carbohidratos (en proporción al número de carbonos), de tal manera que a través de ecuaciones sencillas, se pueden calcular estas variables. Para esto es fundamental el valor del cociente respiratorio (R = VCO2/VO2). Valores de 0.7 indican oxidación exclusiva de grasas y valor de 1.0 indica oxidación exclusiva de carbohidratos.
2. En el foro, acabo de responder a otra pregunta similar (te recomiendo que consultes la respuesta al compañero Erick). Brevemente, tenemos datos de efecto agudo, pero no de efecto crónico (hay que investigar sobre esto). Sin datos científicos, mi opinión es que la cafeína sí sera efectiva para “ayudar” al entrenamiento/dieta en este objetivo. Pero es importante saber que la suplementación de cafeína, como otros tipos de suplementación, tiene una papel secundario frente a los verdaderos factores importantes: entrenamiento y dieta.
3. Para que una sustancia se incluya en la lista de sustancias prohibidas tiene que cumplir 2 de estos tres factores a) incremento del rendimiento deportivo; b) riesgo para la salud de los deportistas; c) violación del espíritu del deporte. En 2004 se decidió que la sustancia no cumplía con los dos últimos (salud/espíritu), y por eso se elimininó de la lista. Las evidencias de los últimos años mantienen esta tendencia; aunque hay investigaciones que hablan de los efectos secundarios que se producen tras consumir cafeína, estos no llegan para entender que la cafeína presenta un riesgo potencial para la salud del deportista…al menos si se consume en dosis moderadas.
Un saludo,
Juan.
