Perfil muscular de un campeón del mundo

campaeon_del_mundo_vallasIndependientemente de la disciplina deportiva, cualquier campeón del mundo muestra unas características fisiológicas que se alejan de lo denominado “normal”. Para los fisiólogos del ejercicio son referencias únicas, como por ejemplo los 90 ml O2/kg/min de VO2max obtenidos en un esquiador de fondo, o los 65 ml O2/kg/min correspondientes al primer umbral (umbral láctico) en el mismo atleta, un valor que probablemente solo un 5% de la población es capaces de alcanzar en su VO2max. Recientemente se han publicado los resultados de una valoración muscular única, realizada a un atleta actual campeón del mundo de 60 m vallas (7.30 s), y ex-plusmarquista mundial de 110 m vallas (12.91 s) (Trappe y col, 2015; J Appl Physiol 6-mar). Se obtuvieron biopsias musculares del vasto lateral en reposo y 4 h después de ejercicio de fuerza de alta intensidad. Los resultados mostraron un 24% de fibras IIx, para un total de 71% de fibras musculares tipo II. La potencia de las fibras IIx, fue dos veces superior a la obtenida por las fibras IIa, y 13 veces más alta que las de las fibras tipo I. La abundancia de fibras musculares IIx es la más alta observada en un atleta sprinter, y la potencia desarrollada por las fibras musculares IIa y IIx la más elevada registrada hasta la fecha.

Un error muy habitual entre los deportistas aficionados en general, y también en algunos entrenadores poco experimentados, es tratar de imitar o reproducir los esquemas de entrenamiento de deportistas de elite. Hacerlo, supone en la mayoría de los casos el fracaso asegurado. Y es que las características fisiológicas de esos grandes campeones los hacen únicos, no solo para lograr rendimientos excepcionales en sus disciplinas, sino también asimilar unas cargas de entrenamiento no aplicables en la inmensa mayoría de deportistas.

Suscríbete ahora al Club EP&T, y llévate todas las formaciones por sólo 8€/mes, además de poder acceder a artículos especiales del blog